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Banco de Galicia Campaign - July and August 2011 - IEO # Chronicle II
Viernes 22 de julio de 2011
Inmersión en un monte del Banco de Galicia
22 de Julio, comenzamos a las 08,00 de la mañana, con la mejor mar de todos los días hasta el momento. La primera inmersión del trineo de fotogrametría Politolana será en la cima de un monte para descender por una de sus laderas en función del viento y la corriente.
Inicialmente el trineo se desvía de la cúspide, atacando la ladera oeste, y comienza el transecto con buen equilibrio y visibilidad, desde la base sedimentaria. El fondo, conforme ascendemos, se va haciendo más rocoso, en forma de piedras negras aisladas. Más tarde estas piedras se convierten en bloques más grandes, hasta llegar a las primeras formaciones de coral, seguidas de cinturones continuos de coral muerto con algunas ramas vivas. La emoción se hace patente en el puente del Miguel Oliver, son los fondos más ricos e interesantes que hemos podido observar directamente con la cámara desde que comenzó la campaña. Cuando estamos ya a pocos metros de la cima y de pasar a la otra ladera, la maquinilla del barco se para, el trineo pierde altura y finalmente queda anclado en los corales, el visor de la cámara queda como una foto fija, en la que brillan como dos ojos malévolos los dos puntos verdes de los láseres, sobre el fondo de pantalla de corales muertos. La historia de la mortalidad de estos corales es uno de los enigmas que nos gustaría desvelar: desde cuánto tiempo llevan en este estado y por qué. La datación de los ejemplares muertos recogidos con las dragas nos ayudará en esta tarea.
El momento es algo dramático por lo caro que cuesta conseguir estos equipos y el riesgo de perderlos; poco se puede hacer hasta recuperar la maquinilla, y tememos que por el impulso del barco y la corriente, el cable o el propio trineo queden atrapados en el fondo, pero la tripulación del Miguel Oliver se pone en marcha en seguida. Los segundos y la tensión se hacen interminables. Finalmente recuperamos el control de la maquinilla y el trineo, barriendo literalmente el cinturón de corales, asciende con dificultad. El último escollo es una afilada piedra negra en lo más alto del monte, que es superada por el Politolana por milímetros.
La inmersión dio algún que otro sobresalto a algún miembro del equipo de fotogrametría. Pero, independientemente de esto, el transecto ha sido interesantísimo. Por la tarde hicimos otras dos inmersiones sin problemas.
Los inquilinos
En el tanque del Aquarium Finisterrae, empiezan a asentarse los inquilinos. Los corales de aguas frías, Madrepora oculata, están ya acomodados, con su bellos pólipos abiertos. Comenzamos a alimentarlos usando un menú variado y rico en los nutrientes que necesitan este tipo de animales. Los del agua, conseguidos por un potente enfriador, y la completa oscuridad del tanque simulan las condiciones del fondo del mar de donde les extrajimos.
Otro huésped, el cangrejo Chaceon affinis, no confía en el alimento que le facilitamos y prefiere papearse a un compañero de cautiverio, la anguila de profundidad, Synapobranchus kaupi que había muerto minutos antes a causa de la enorme descompresión a la que ha sido sometido al izarlo desde más de mil metros de profundidad.
Poco a poco y lance a lance, la colección biológica va ganando efectivos y las celdillas de rejilla en las que los colocamos se van multiplicando dentro del tanque. Toda la tripulación del barco se interesa por los nuevos inquilinos y ahora sólo nos queda esperar que los cuidados que les proporcionamos a todos estos animales sean los que necesitan para salir adelante y vivir cómodamente en el acuario.
Piedras, gambas y dragas en huelga
Prosiguen los estudios con todos los medios a nuestra disposición. Dragas de roca, de las que extraemos bellos corales bambú, desconocidos corales negros, esponjas, moluscos, acorazados cirrípedos, lirios de mar pedunculados, etc., además de rocas de diferente tipo que serán analizadas por los compañeros geólogos.
Realizamos un trineo suprabentónico en una pequeña cubeta sedimentaria del techo del banco donde, aparte de la acostumbrada fauna de crustáceos peracáridos, capturamos dos ejemplares de gran tamaño de la gamba Plesionika martia, hembras ovadas con sus huevos azules.
La draga de fango nos crea problemas, ocasionados por la escasa capa sedimentaria y por un cable díscolo que bloquea el disparador. Aún así conseguimos una buena muestra de endofauna a de profundidad.
Por ahora el banco nos sigue tratando bien, con un tiempo inmejorable, a pesar de que le seguimos arrancando sus secretos vídeo a vídeo, draga a draga.
En los próximos días continuaremos informando del desarrollo de la campaña.
Saludos
(Posted July 22, 2011)