El día 5 de mayo salimos de nuevo en una zona de calma, al noreste de la isla, que asegura una detectabilidad estupenda.

Desde la torre de avistamientos podemos alcanzar más de 6 millas de superficie marina a rastrear en busca de soplos, cuerpos, aletas o salpicones.

A las 8:30 h ya está el equipo con la manguera y la aspiradora en ristre. La verdad es que en una embarcación siempre hay algo que hacer, sobre todo en materia de limpieza y mantenimiento, así que mientras unos se afanan con cristales, pasamanos y demás, otros preparan todo el material de investigación a utilizar durante la jornada.

Todo está listo y acondicionado para zarpar. Abandonamos el muelle de Puerto Calero a las 9:30 h. Aparte del equipo habitual, hoy nos acompañan Jorge Cáceres, Clara Suárez, Violeta Sánchez, Francisco González y David Luna. Igual que ayer, el día ha estado muy bueno y las condiciones para avistar cetáceos han sido inmejorables. Poco viento, escaso mar de fondo, cielo despejado… la detectabilidad ha sido excelente durante todo el día, de nuevo algo poco habitual en esta zona.

Nada más salir del puerto, gracias a la altura que alcanzan los soplos, se avistan tres rorcuales tropicales (Balaenoptera edeni); se trata de una madre con su cría y otro individuo adulto. Se han fotoidentificado por un lado (el izquierdo) pero ha sido imposible fotografiar las aletas por su lado derecho. La evasividad de las ballenas y la situación del sol en ese momento no lo han permitido. Tampoco se ha conseguido una cercanía que posibilitara obtener una muestra genética.

Hoy también se han avistado delfines mulares y calderones tropicales. De hecho ambos grupos constituyen recapturas, es decir, se trata de los mismos animales de la jornada anterior. Además la zona es más o menos la misma, no parece que se hayan desplazado mucho en las últimas horas. La fotoidentificación de las aletas permite precisamente esto, reconocer individuos previamente fotografiados gracias a sus muescas y cicatrices.

Para dejar constancia de esta recaptura, se vuelven a fotografiar todos los individuos. El análisis detallado de las fotografías siempre permite descubrir individuos nuevos, el lado de una aleta no fotografiada de un ejemplar, etc.

En ambas especies han vuelto a observarse adultos (algunos los reconocemos), juveniles y varias crías, aunque en el caso de los calderones no se han avistado grandes machos. Probablemente se trate de un grupo guardería formado por hembras con crías, hembras maduras sin ellas e individuos juveniles de ambos sexos.

A media tarde (16:32 h) y muy lejos del barco, a una distancia estimada de 4.500 ó 5.000 m (tal era la detectabilidad) se ha avistado un zifio. Muy probablemente se tratara de un zifio común o de Cuvier (Ziphius cavirostris) por su gran tamaño y coloración muy clara, pero al no verse más y carecer de fotografías no se puede asegurar y queda catalogado como “zifio no identificado”.

Comenzamos la vuelta al puerto pasadas las 18:00 h y por el camino se va limpiando y recogiendo todo el material. El hidrófono se mantiene mientras la profundidad lo permita (200m) y los datos de acústica son los últimos que se registran. Sabemos ya que durante tres días la meteorología vuelve a ser desfavorable. Tenemos una previsión de 20 a 25 nudos de viento hasta el miércoles día 10, pero por supuesto ha merecido la pena salir en esta zona durante dos días ya que se han avistado delfines mulares, que son la especie objetivo de este proyecto. Todo y todos quedan preparados para la travesía al sur de Fuerteventura en cuanto sea posible, esperamos sea cuanto antes…...

(Posted June 5, 2012)